Inicios

Sergio Pérez de Gregorio, es una joven promesa del rejoneo que, desde pequeño, ha crecido en un entorno que no se dedicaba profesionalmente al mundo del caballo, pero en el que había caballos por afición. En esa etapa de infancia le regalaron un pony, con el que tiene recuerdos muy especiales al tratarse de su primer contacto con el mundo ecuestre.

Más adelante, Piropo fue el nombre de su primer caballo, el de sus inicios, con el comenzó a torear animales a campo abierto. Con 14 años toreó su primera vaca en público en la plaza de toros de su localidad natal, Peñaranda de Bracamonte. Sergio Pérez de Gregorio tiene un concepto único del toreo a caballo, estuvo un mes en casa de Diego Ventura aprendiendo las bases y poco a poco debido a su capacidad autodidacta, se ha ido forjando en solitario.

Quiebro al revés

Su rasgo diferenciador y principal seña de identidad en el rejoneo es el quiebro al revés, ya que es el único que realiza esta suerte, y lo hace con Níquel, una de las estrellas de su cuadra.

Primer rejoneador salmantino

Sergio Pérez de Gregorio, es el primer rejoneador salmantino en la historia del toreo a caballo. Su talento, trabajo y amor propio, han permitido que, con tan sólo 22 años, haya entrenado en primera persona a más de la mitad de los integrantes de su cuadra. Tiene la ilusión de llegar a ser figura, buscando la emoción de los aficionados en los tendidos a través de la sorpresa, aunque priorizando siempre torear con pureza y autenticidad.